Ventajas de las paredes de pladúr (II)
La semana pasada os contábamos algunas características de las paredes de pladúr, un material muy común en otros países pero que en nuestro país está muy mal visto usarlo en nuestras viviendas.
Lo cierto es que las laminas de pladúr son muy utilizadas para dividir espacios dentro de las viviendas, contando con grandes cualidades, como por ejemplo, la lucha contra el moho o los hongos en nuestra casa gracias a la instalación de placas especiales pensadas para habitaciones donde la humedad puede afectar la estructura de la vivienda.
La instalación de paredes de pladúr no es un sobrecoste, en relación calidad precio, las paredes de pladur y las paredes de ladrillo, con un mínimo de 7 cm, tienen el mismo coste, si bien, los ladrillos deben recibir una capa finas en la que poder pintar o instalar azulejos y todos estos detalles acaban por igualar costes.
Las paredes de pladur, en cambio, son más rápidas de instalar, lo que supone una reducción del tiempo de obra frente a las tradicionales paredes de ladrillo. Su espacio interior genera un lugar donde poder instalar toda la instalación eléctrica de una manera, debido a que las paredes tradicionales debemos partir el ladrillo para la instalación del macarrón, lo que puede provocar un debilitamiento de la estructura y la generación de grietas con el paso del tiempo.